"DANIEL"
"Daniel" tiene 77 años y vive solo en un edificio de apartamentos independientes para personas mayores. Aunque está alerta y orientado, su autodescuido se manifestaba en su falta de limpieza. Cuando sus condiciones de vida se deterioraron y su apartamento atrajo roedores y cucarachas que se extendieron a otras partes del edificio, el programa de Servicios de Protección de Adultos (APS) de Metropolitan se enteró de la situación e intervino para ayudar.
El programa APS investiga las denuncias de malos tratos, abandono y explotación de personas mayores y adultos con discapacidad, y pone en contacto a las víctimas con recursos de apoyo para mejorar su situación.
María Raygoza, trabajadora social de APS, visitó el apartamento de Daniel y cuenta que no le resultó fácil dejarla entrar. Pensaba que la había enviado su familia, en la que no confía, y no fue hasta su segunda visita cuando empezó a abrirse y a aceptar ayuda.
Con el consentimiento de Daniel, María empezó a coordinar la ayuda que necesitaba. Se puso en contacto con el Departamento de Servicios Familiares y de Apoyo de Chicago para que le remitieran a un servicio de ayuda doméstica y de tareas domésticas pesadas, con el fin de limpiar a fondo la casa de Daniel y proporcionarle ayuda doméstica continuada.
María se puso en contacto en nombre de Daniel, y con su aprobación, con la empresa de limpieza y la empresa de tareas domésticas recomendadas por el DCFSS, acelerando el proceso para cada una de ellas. Confirmó que el edificio contrataría a un exterminador y comprobó con sus contactos que Daniel recibiera los servicios.
"Estoy agradecida por haber podido contribuir a que [Daniel] viva ahora en un entorno seguro y limpio", dice María. "Pude cambiar su situación de vida recomendándole los recursos adecuados. Sé que [Daniel] está contento con los cambios positivos en los que pude ayudarle."
Gracias a los esfuerzos de María, en tres semanas la casa de Daniel estaba limpia. En ocho semanas, tenía una asistenta que venía regularmente.
"Ahora sé que [Daniel] confía en mí y en APS por lo que hicimos por él", dice María. "Seguiré ayudando y defendiendo a los necesitados y seguiré haciendo cambios positivos en las zonas en las que presto mis servicios".
* Nombre del cliente cambiado para proteger su identidad.
SOBRE LOS SERVICIOS DE PROTECCIÓN DE ADULTOS
Los Servicios de Protección de Adultos investigan los informes de abuso, negligencia, explotación (ANE) y auto-abandono (SN) de personas mayores de 60 años y adultos de 18 a 59 años con discapacidades. Cuando se confirman las acusaciones de ANE y/o SN, se planifican intervenciones con el cliente, la familia y otras personas para reducir el riesgo de nuevos daños. Si es necesario, se proporcionan referencias de servicios jurídicos.