Declaración del Metropolitan sobre George Floyd
Estamos viviendo uno de los momentos más difíciles de la historia moderna de nuestro país, un momento en el que la gente ha decidido que hay que poner fin a los asesinatos de hombres negros inocentes. Tras las manifestaciones pacíficas y los disturbios en todo el país y en casa, estamos luchando para gestionar una mezcla de emociones: dolor, ira, confusión. Algunos de nosotros simplemente estamos cansados, preguntándonos qué hacer a partir de ahora.
En Metropolitan Family Services, estamos de acuerdo en pedir justicia para George Floyd y los muchos otros que han sido asesinados como él. Para nosotros, la pérdida es especialmente penetrante y próxima. Muchos de los clientes a los que atendemos y de nuestro personal son de piel negra y marrón. Nuestra solidaridad con sus preocupaciones no es hipotética, es personal. Es personal porque George podría haber sido nuestro hermano, padre o hijo. Podría haber sido nosotros.
Justo cuando nos preparábamos con entusiasmo para la vida después de COVID-19, nos encontramos con el virus más familiar: el racismo. Nos encontramos en una encrucijada. Aunque sería fácil compartir tópicos o aceptar resultados fatalistas, no elegimos ninguna de las dos opciones. En su lugar, vemos oportunidades. Este es un momento crucial para aprovechar la voluntad -en consonancia con el gran espíritu de nuestra ciudad- de crear. Es hora de volver a imaginar cómo podemos y debemos desarrollar formas de eliminar las disparidades raciales, fortalecer nuestras familias y comunidades, y crear una comunidad cívica que valore a todos y ofrezca igualdad de condiciones.
Los cambios necesarios requieren actitudes positivas, diálogo honesto y acción. Nos comprometemos a hacer lo que nos corresponde: dotar a las familias de toda la gama de servicios educativos, emocionales, económicos y jurídicos que necesitan para ser y dar lo mejor de sí mismas a la sociedad. Le invitamos a encontrar formas de marcar la diferencia que inspiren su pasión y compromiso. Asóciese e invierta en organizaciones comunitarias que marquen una diferencia real en la vida de las personas. Abogue con la comunidad empresarial y los legisladores para promover oportunidades educativas y económicas que preparen a todos nuestros residentes para prosperar y liderar.
En el proceso, el asesinato de George Floyd no quedará relegado a un parpadeo en la cronología de la historia. Por el contrario, habrá sido el catalizador de un nuevo día y un nuevo futuro para Chicago y, esperemos, para nuestra nación.
Como escribió James Baldwin: "No todo lo que se afronta puede cambiarse, pero nada puede cambiarse hasta que se afronta".
En paz, esperanza y solidaridad,
Ric Estrada
Presidente y Consejero Delegado
Ashley Duchossois Joyce
Presidente del Consejo de Administración